Combinar el running con actividades sin impacto es una gran forma de complementar el entrenamiento. El spinning en bicicleta fija ayuda a trabajar la fuerza y la capacidad cardiovascular.
Utilizar la bicicleta como parte del entrenamiento es una opción que cualquier corredor debería probar alguna vez.
No se trata de reemplazar la carrera a pie, sino de aportarle otra dinámica a la rutina de los entrenamientos específicos.
Por su capacidad aeróbica el spinning aporta muchas ventajas a los corredores, puesto que permite aumentar y mantener el buen estado del aparato vascular.
Algunos grandes beneficios del spinning
• Al no tener impacto, se evita el estrés muscular y articular.
• Ideal para la recuperación activa después de un entrenamiento duro o poscarrera.
• También para cuando las condiciones climáticas no son favorables (lluvia, frío, etc.).
• Se trabajan resistencia, velocidad, flexibilidad y coordinación, entre otras áreas.
• Se fortalece la musculatura complementaria a la de la carrera.
• Aumenta la capacidad aeróbica, lo que mejora la salud del corazón.
• Es una gran opción para quemar calorías.
Algunos consejos útiles
• Antes de la primera clase, coordinar con el profesor para que la actividad termine siendo agradable.
• Ajustar la bicicleta a la longitud del cuerpo será fundamental para evitar dolores posteriores.
• Se debe realizar una entrada en calor: aumenta el flujo de sangre hacia el músculo, lo que disminuye la rigidez muscular. Comenzar a pedalear con suavidad.
• La resistencia debe estar en sintonía la capacidad de cada uno.
Se controla manualmente y es muy personal.
• Se deben respetar las indicaciones del profesor a cargo para que la clase sea productiva.
Fuente: Clarin
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