Esta medida es exigida por los Centros para el Control y la Prevención de Enfermedades de Estados Unidos (CDC, por sus siglas en inglés). Entrará en vigencia el martes 26 de enero para todos aquellos pasajeros que ingresen al país en avión. El test deberá realizarse 72 horas del viaje.
«Con Estados Unidos aún en un estadio de surgimiento, el requerimiento de las pruebas para los viajeros por vía aérea ayudará a ralentizar la propagación del coronavirus mientras trabajamos en vacunar a la población estadounidense», explicaron.
El director de los CDC, Robert Redfield dijo: «Si bien las pruebas diagnósticas no eliminan todo el riesgo, cuando se combinan con un período de aislamiento y precauciones diarias, como usar mascarilla, pueden hacer que viajar sea más seguro, saludable y más responsable de reducir la propagación en aviones, aeropuertos y lugares de destino”.
Por otro lado, si ya se ha tenido la enfermedad, será necesario presentar documentación que acredite que el pasajero ya se ha recuperado.
Según informaron las autoridades sanitarias, en Estados Unidos hay más de 22,7 millones de contagios y cerca de 380.000 víctimas mortales.
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