Mediante una carta documento, las tres entidades farmacéuticas le exigieron a la obra social nacional el pago de las facturas vencidas, además de un cronograma concreto de las prestaciones y que se restablezca el calce financiero. Si no tienen una respuesta inmediata, el próximo martes se podría declara la “suspensión del crédito” a la entidad.
Los nubarrones en el horizonte de las farmacias argentinas se fueron tornando más negras, y prometen tormentas en breve. Las sospechas sobre el nuevo convenio del PAMI; que trae como resultado un posible problema financiero para el sector independiente, pusieron en movimiento a las entidades farmacéuticas, que decidieron exigirle respuestas a la obra social. Ayer jueves, mediante una carta documento, las tres organizaciones decidieron exigir el pago inmediato de la deuda vencida por la dispensa de medicamentos, y amenazaron con medidas de fuerza de no tener respuesta. El pedido incluye que se informe de un cronograma de pago de las facturas actuales y las futuras, y que se vuelva a poner en marcha en calce financiero. Si no hay una respuesta inmediata, el martes próximo se tomarían medidas de fuerza, incluyendo el corte de servicio.
La carta documento dirigida a las autoridades del PAMI lleva la firma de las autoridades de las tres entidades: Isabel Reinoso de la COFA, Miguel Lombardo de la FACAF y Carlos Villagra de la AFMSRA. La misma busca poner blanco sobre negro respecto del nuevo convenio de la entidad y la industria farmacéutica, firmado la semana pasada, y el cual no trae buenas noticias para el sector minorista. Las entidades aseguran que “no teniendo novedades en el sentido del pago de la deuda vencida a las farmacias por prestaciones en el convenio PAMI medicamentos, que asciende a la cifra aproximada al 3 de julio de 2.600 millones de pesos, ni certezas acerca de la continuidad de los pagos, sus plazos y condiciones, exigimos la firma de un acuerdo”.
El reclamo farmacéutico apunta a tres puntos fundamentales. Por un lado, “el pago inmediato de la deuda vencida al día de la fecha, el restablecimiento del calce financiero para las farmacias y un cronograma del pago de las prestaciones en curso a las farmacias, en virtud del ‘puente financiero’ ofrecido por la ACE-PAMI al Instituto que obviamente no debe ni puede ser asumido por las farmacias”. “En caso de no tener una respuesta inmediata y favorable a nuestros reclamos, el próximo martes 11 de julio a las cero horas las farmacias suspenderán el crédito a la ACE-PAMI en el convenio de prestaciones al INSSJP, dispensando medicamentos sin descuento a sus afiliados”, remarcaron las entidades, que advirtieron que “deslindamos toda responsabilidad por las consecuencias que pudiera ocasionar la situación arriba mencionada”.
Pese al nuevo convenio, la tensión volvió a apoderarse del sector, cuando en la “letra chica” quedó claro que la diferencia entre el techo de pago que acordó el PAMI –unos 2.400 millones de pesos –y el gasto real en medicamentos no estaba explicitada quién iba a absorberlo. Por eso, las farmacias piden que la industria de los medicamentos hagan un compromiso concreto que van a abonar la diferencia surgida, sino “el paso de este desfasaje recaerá sobre los bolsillos de empobrecidos de la farmacia independiente”.
Sería importante que los firmantes del nuevo convenio del PAMI –el gobierno nacional y la industria farmacéutica –más los lobbistas que están alrededor del convenio entiendan que siempre no pueden perder los mismos, que en los momentos críticos del país garantizaron la atención y el sostenimiento de un sistema que supo ser vanguardia y un orgullo nacional.
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