Según informó un grupo de investigadores chinos, la leche bloquea la adhesión viral e incluso la replicación de las células del virus.
El equipo, dirigido por el profesor Tong Yigang de la Universidad de Tecnología Química de Pekín, descubrió que este hallazgo contradice la forma de actuar en un principio en Wuhan. Allí, a los recién nacidos se los separó de sus madres que eran positivas de Covid-19 y se los alimentó con leche en polvo.
La Organización Mundial de la Salud (OMS) también afirma que las madres deben amamantar a sus bebés, incluso si estos están infectados de coronavirus.
En la investigación se detectaron genes virales en la leche de tres madres, pero no hubo evidencia de infección. Del total de menores, sólo un dio positivo y no se pudo descartar que se haya infectado a través de otros medios. Los investigadores mezclaron algunas células sanas en la leche materna humana, luego lavaron la leche y expusieron las células al virus.
El lactosuero consiguió suprimir las cepas virales vivas en casi un 100 %, según el estudio.
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