En el marco de las jornadas del Instituto de Formación y Gestión (IFG) de la Federación Farmacéutica de la República Argentina (FEFARA), el titular del PAMI Sergio Cassinotti abrió un nuevo capítulo en su pelea con la industria farmacéutica de bandera nacional.
El conflicto comenzó hace unos meses cuando se rompió el convenio de dispensa de medicamentos, una situación que terminó por cambiar la forma en que la obra social nacional paga las recetas.
Cassinotti declaró que habrá una “fuerte campaña de concientización” para que los médicos dejen de recetar por nombre comercial y los farmacéuticos puedan aconsejar a los jubilados la sustitución por una opción más económica y agregó: “vamos a ir muy fuerte para frenar la prescripción por marca, ya lo estamos probando en Córdoba”.
En esa provincia el uso de genérico era del 7 por ciento y en una semana de realizar estos cambios subió al 24 por ciento.
En este mismo sentido, el PAMI puso en marcha otra herramienta para bajar el precio de los fármacos, las compras en conjunto.
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