Este estudio se realizará sobre poco más de 200 personas que ya recibieron la primera dosis de la Sputnik V, y se les aplicará Sinopharm o AstraZeneca.
«Vamos a evaluar sobre todo reacciones adversas en el primer o segundo día, si hay dolor, fiebre o cansancio para analizar si esa combinación tiene mayores efectos; luego haremos un seguimiento clínico de dos semanas y a los 21 días mediremos el grado de inmunidad que despertaron las vacunas», explicó el ministro de Salud de la Ciudad de Buenos Aires, Fernán Quirós.
El principal objetivo de este análisis es de acortar el plazo entre ambas dosis para responder con mayor eficacia a las nuevas variantes de coronavirus, especialmente la Delta. Y responde a la demora en la llegada del segundo componente de la vacuna rusa.
La etapa inicial comienza hoy en el Hospital Muñíz.
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